Entrevista a nuestra Broker Carmen “Ames'” De Jongh en la edición 78 de la Revista CLUB MAGAZINE VENEZUELA. Agosto 2016. Pag 39.
https://issuu.com/clubmagazine/docs/club_78
Reseña por: Gonzalo Peña
Fotos: Carlos Fuguet
Nacida en la pequeña ciudad universitaria de Ames en los Estados Unidos, mientras su papá –Richard De Jongh, casado con la valenciana Josefina “Joché”Rotondaro de De Jongh- estudiaba en Iowa State University, Carmen Elena De Jongh Rotondaro regresó a Venezuela con dos idiomas –inglés y español- a muy corta edad, una personalidad absolutamente encantadora, una inteligencia emocional hiperdesarrollada y un don de liderazgo natural que la hizo convertirse en referencia entre las jóvenes valencianas en los años ochenta. No en vano, sus padres, gente altamente estimada en la capital industrial de Venezuela, también han resaltado en la vida social y económica de la región carabobeña, y son ejemplo de trabajo y constancia a través de una agencia de Bienes Raíces –Administradora Zebrón- fundada en Valencia hace 40 años y todavía presente en la escena inmobiliaria de la ciudad, operando a través del sistema de franquicias Century 21.
Como para recordar siempre el nombre del pueblo norteamericano donde nació, sus familiares y amigos comenzaron a llamarle Ames. No había reunión, fiesta o sarao en esa Valencia de los años ochenta a la que la presencia de la popular “Ames” no fuera requerida. Su personalidad, siempre entradora, llena de simpatía, se ganaba el cariño inmediato de su infinita lista de amistades, no solo de ellos, también de la familia de sus amigos, papás y mamás veían en ella una más de la familia. Y así ha permanecido a través del tiempo, cultivando esas relaciones de toda la vida, a pesar del tiempo y la distancia.
Junto a sus dos hermanos menores, Ricardo y Juan Carlos –Tato-, desde muy pequeños, los De Jongh Rotondaro crecieron viendo a sus padres como ejemplo de trabajo y dedicación en el área de Bienes Raíces y referencia de profesionalismo en Valencia. Más interesante aún, crecieron viendo el amor de Richard y “Joché” por el trabajo y aprendieron la dinámica de hacer negocios acompañándoles en la oficina o en alguna cita con un cliente. “En los almuerzos en la casa, a veces se hablaba de los contratos de arrendamientos, de los términos y a mi me gustaba aprender de eso. De hecho, en las vacaciones ayudaba a mi mamá en la oficina, pero tenía el reto personal de desarrollar algún día mi propia empresa, por eso yo quería estudiar y trabajar en otras áreas” recuerda Ames.
Luego de obtener el titulo de Bachiller en Ciencias en el Instituto Santa Cruz, comienza a estudiar en Bentley College, muy cerca de Boston en Estados Unidos. Allí obtuvo su titulo en Finanzas y Mercadeo, además de una gran base de datos de amistades en Estados Unidos y Latinoamérica. Nuevamente, regreso a Venezuela para comenzar a trabajar. La llegada de DirecTV a Valencia en los años noventa se hizo por la puerta grande porque Ames, una networker por naturaleza, fue contratada en el departamento de ventas y nada más con la inmensa cantidad de gente que conocía, las suscripciones se multiplicaron en muy corto tiempo. Además de lo atractivo de esta nueva oferta satelital, para el target que apuntaba la compañía en la región significaba un “plus”la presencia de Carmen “Ames” De Jongh en el staff de ésta, no solo por la raigambre de su familia, sino porque ella ya era referencia de responsabilidad y compromiso en el servicio. “Mi paso por DirecTV y, luego por la naviera Sealand Maersk en Venezuela, me dotaron de una disciplina de enfoque universal que no es igual a la que tiene una persona que comienza laborando como empresario. Allí empiezas desde abajo y tienes que ganarte la confianza a partir de una estructura basada en parámetros internacionales” asegura De Jongh.
Luego de unos años trabajando en Venezuela, Ames regresa a los Estados Unidos, específicamente a Miami, donde comenzó a trabajar en ventas para un canal de televisión local. Luego la contratan en la empresa Brightstar que comienza a distribuir los forros de celulares de la marca Bodyglove para Latinoamérica y tuvo que viajar por el continente para captar clientes para este producto, además de conocer los diferentes mercados de la región. En esos ires y venires, conoció a Martin Claure, nacido en Bolivia y residenciado en Miami, con quien contrae matrimonio en una celebración realizada aquí en Valencia y reseñada en la segunda edición de esta publicación.
La pareja fija residencia en Miami y poco después nació Cristina, la primogénita, mientras tanto, Ames seguía manejando la distribución de Bodyglove y paralelamente, sacó su licencia como Realtor, convirtiéndose en representante de la empresa de su familia –Zebrón Century 21- combinando negocios en el sur de la Florida con clientes remitidos por Ricardo, su hermano, y su mamá, desde la oficina de Valencia. Fue tal el éxito, que abrió una oficina en Doral en el 2001 para manejar esas ventas. Sin embargo, Martin quería hacer un MBA en Chicago y tuvo que congelar ese fructífero negocio, pero el gen inmobiliario que viene dentro de sus cromosomas ya se había alborotado.
Los Claure -De Jongh llegaron entonces a Evanston, a 20 minutos de Chicago, una ciudad satélite que acoge a los estudiantes de MBA de Northwestern University -la escuela Kellogg de Gerencia-, y lo primero que encuentran es algo de dificultad para conseguir alguien que les asesorara para alquilar una vivienda que llenara sus expectativa y características como núcleo familiar en plan de estudiantes. Es así como ven una oportunidad de negocio entre los otros cursantes de post-grado que llegaban a la zona, con características similares a ellos e, igualmente, en busca de alguien que les guiara en el tipo de inmueble y zona que mas se adapte a su estilo de vida. Con la agilidad que le caracteriza, Ames obtuvo la licencia de Realtor para la zona y comenzó a trabajar desde su casa en Colfax Avenue de Evanston, Illinois, acogiendo a todos los recién llegados interesados en conseguir vivienda durante los dos años que duraría el curso. Fue así, en el sótano de la casa de Martin y Ames, donde nació en 2003 la compañía MBA Properties, teniendo como filosofía principal, algo que ella aprendió de sus padres: convertirse en aliados y consejeros de sus propios clientes para trabajar una relación comercial a muy largo plazo.
El servicio que comenzaron a prestar –a través de un website- para los estudiantes de post-grado que llegaban a Evanston era tan especial, que incluía recomendaciones personalizadas para los nuevos residentes con los sitios para comprar víveres, fiestas o eventos de cada semana, sitios culturales a donde ir, restaurantes recomendados de la zona y todo un conjunto de beneficios que hicieron de esta fórmula un verdadero éxito de rápida expansión que dio lugar a lo que ahora conocemos como Colfax Realty Group. Los mismos compañeros de estudios de Martin y las esposas de ellos, comenzaron a trabajar buscando estudiantes de MBA interesados en alquilar propiedades en la zona. Muchos de ellos, incluso, compraron propiedades en la zona y actualmente son administrados por la sucursal de Colfax en Evanston.
La fórmula exitosa de Colfax como agencia de alquileres especializada en estudiantes de postgrado la llevaron también a downtown Chicago, Boston, Nueva York y Miami. Todo iba de maravilla pero, lamentablemente, la crisis inmobiliaria de 2008, desaceleró ese crecimiento y tuvieron que cerrar las oficinas de Boston y Nueva York, quedando la de Evanston, Chicago y Miami como la dos sucursales que al día de hoy siguen su trayectoria exitosa. “Lo importante, durante ese momento de crisis, fue que nosotros –por lo mismo que nos gusta mantener relaciones a largo plazo- no participamos mucho del boom porque adivinábamos, a través del aumento exagerado en los precios de los inmuebles, que algo estaba pasando y nos enfocamos entonces en los alquileres y fuimos más cautelosos en recomendar a nuestros clientes algunas inversiones”.
En 2007, Ames y Martin se convierten en padres de los gemelos Martin y Diego, y se trasladan a vivir en Venezuela por unos meses e inmediatamente a Panamá, el incipiente melting pot inmobiliario de América Central, donde comenzó una transformación importante y la proliferación de grandes desarrollos que invitaron al team Colfax a abrir una oficina en esta pujante metropolí, plenamente operativa al día de hoy. Actualmente Colfax Realty Group, sigue basándose en los principios que la vieron nacer de brindar atención experta y personalizada a cualquier cliente que se acerque a solicitar asesoría sea ésta para inversión, o para conseguir una residencia primaria o secundaria (vacacional). Además de esto ofrecen toda la infraestructura para arrendar el apartamento, casa, local comercial o galpón que un cliente haya comprado como inversión, teniendo incluso departamentos destinados al mantenimiento de estas propiedades –pintura, plomería, electricidad y servicios generales-, una suerte de integración vertical de la estructura de negocio para ofrecer a sus aliados comerciales –sus clientes- el mejor de los servicios. “Si una persona se acerca a nosotros porque simplemente le interesa invertir, simplemente pensamos en números, ¿dónde –en este momento- tiene mayor rendimiento su dinero para invertirlo ahí?. Si es como segunda casa o vivienda vacacional, nuestra búsqueda dependerá del estilo de vida del cliente ¿cerca de la playa? ¿cerca de algún mall? ¿cerca de algún familiar que vive aqui? Y si es vivienda principal, nos enfocamos en la zona donde va a trabajar, recomendamos los colegios de acuerdo a la urbanización –si tienen niños-. Cada quien tiene una búsqueda y eso para nosotros es importante.”
“Miami y las zonas que se entrelazan al norte de ésta, tienen un crecimiento interesantísimo en este momento y ofrece muchas alternativas de estilo de vida para las personas que vienen de todas partes del mundo a vivir o invertir aquí. No podría generalizar de una zona que esté apetecible porque todo depende de lo que la persona este buscando, insisto, para nosotros en Colfax es importante el objetivo final de nuestro cliente” asegura Carmen “Ames” De Jongh, “Si hay algo interesante que está sucediendo y es que hay proyectos que activan o revalorizan algunas zonas y nosotros siempre nos ocupamos de tener la representación de esas inversiones para tener una cartera amplia para el comprador o el arrendador. En Miami también está sucediendo que segmentan las zonas de desarrollo inmobiliario de acuerdo a diferentes estilos de vida y eso para nosotros es interesante también para recomendar al cliente donde puede vivir o invertir, sea en residencial o comercial”.
Escuchar hablar a Ames, a quien conozco de tantos años, con una trayectoria profesional in crescendo, explorando esa vena inmobiliaria con la que vino al mundo, manteniendo esa naturalidad y capacidad para acercarse a la gente, verla hablando emocionada con un cliente potencial, observarla en Instagram acompañada de su amado Martin –quien fundó Colfax junto a ella y ahora maneja también otros negocios-, ver fotos de sus tres hijos con los que comparte un sinfín de aventuras, te confirman que hay gente que nace con una buena estrella y se rodea de gente, como el team que le acompaña en Colfax, que se contagia de una filosofía de vida. La de ser aliado, amigo y consejero de su gente y conformar relaciones solidas y duraderas que se extiendan para toda la vida. Con sencillez y simpatía. Eso es lo que hace especial y productiva a una persona. Es el verdadero secreto de su éxito.
Leave a Reply